The Australian Pink Floyd Show es el mayor y más reconocido tributo a Pink Floyd del mundo. Con más de 4 millones de entradas vendidas en más de 35 países, han sido descritos por The Times como “el estándar de oro” y por The Daily Mirror como “los reyes del género”.
Desde su primer concierto en Adelaida (Australia) en 1988, la banda ha ofrecido una experiencia fiel e impactante, con una ejecución musical impecable y un espectacular despliegue visual: luces, láseres, pantallas LED de alta resolución e hinchables gigantes como su emblemático canguro rosa. Han colaborado con músicos originales de Pink Floyd como Guy Pratt, Durga McBroom y Lorelei McBroom.
Mucho más que una banda tributo, TAPFS ha conquistado escenarios de todo el mundo, llevando el legado de Pink Floyd a nuevas generaciones durante más de 35 años.